Lo vi aquí.
No estará disponible la revisión inquisitoria de el sustrato icónico, simbólico o metafórico de ninguna de las láminas superpuestar y realidades representadas, solamente la mirada más obvia y la oración más sencilla que resulte de esa estrábica recensión ser el punto de partida e inmediata finalización de lo que contenemos, pero haciendo negación de la primera alternativa, la que se refrenda desde la presentación y encarando la tarea desde la historiografía individualizada. No es más que la reclusión de una faceta y la restricción a la comprensión de una presencia. Y esa situación es un momento explícito en la contracara e indefinido, indeterminante y anómico en la faz de mi contemplación; el flujo que genera ese desnivel energético forma una interpelación sin el componente regulador, el desnivel energético se retroalimenta y sin reestablecer la homogeneidad se recalcula en su misma proporción.
La imagen con su pronombre se orientan a la repetición de el ícono evidente y superficial, una lectura obvia y casi textual; lejos de el valor simbólico, la construcción lumínica parece la más valedera; el detalle de la palma incide en una escala cromática sin eco consistente.
